Esta es la Remake de la mejor pizza de molde que he probado, un clásico Porteño. Es abundante en si misma, donde tranquilamente puede alimentar a 4 comensales.
Para que nuestra Pizza sea todo un éxito, es de suma importancia trabajar con materia prima de la mejor calidad que podamos conseguir.
La receta no es nada mas ni nada menos que:
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Masa
- 410 gr Harina 000
- 10 gr Levadura
- 250 cc Agua
- 2 gr Azúcar
- 9 gr Sal
- 25 cc Aceite Oliva
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Relleno
- 300 gr Mozzarella
- 300 gr Cuartirolo (Cremoso)
- 600 gr Cebollas Españolas
Instrucciones:
Para la masa formar una corona con la harina. En el centro colocar la levadura junto el azúcar, el aceite y agregar el agua templada con la sal disuelta en ella e ir trabajando la masa hasta obtener un bollo liso y uniforme, que no se pegue ni a la manos ni a la mesada. Cubrir con un lienzo húmedo o papel film y dejar que leude hasta que duplique su volumen.
Mientras la masa descansa cicelar las cebollas (cortarlas en juliana) lo mas fino posible, esto lo podemos realizar con un cuchillo o bien con una mandolina. Por otro lado rallar los quesos por separado y dejarlos a temperatura ambiente para que cuando entren al horno no lo hagan fríos, así logramos que se fundan correctamente.
Una vez que la masa leudo dividirla en 2: la primera va a ser nuestra base y tiene que pesar 400 gr y la otra sera nuestra tapa y debe pesar unos 200 gr. Disponer el bollo de la base en un molde de 30 cm de diámetro y dejar que duplique su volumen por segunda vez. Con el bollo mas chico, también lo dejamos en su segundo leudado hasta su utilización.
Para armar nuestra fugazzeta vamos a estirar la base en el molde y lo haremos levantar ligeramente por los bordes. Incorporamos los quesos y condimentamos con una pizca de sal y pimienta negra.
Ahora para nuestra tapa vamos a estirar el bollo sobrante lo mas fino posible y lo vamos a disponer sobre los quesos cerrando la preparación como si de una tarta se tratase, evitando de realizar un repulgue demasiado grande, obteniendo así un borde crocante y fino.
Por ultimo disponemos las cebollas sobre la preparación en crudo y llevamos todo junto a un horno pre calentado a 180 grados por espacio de 45 minutos aproximadamente.
Vale la pena aclarar que no todos los hornos son iguales, es por eso que los tiempos de cocción pueden variar.
La Fugazzeta esta lista cuando la masa este dorada por todos sus lados y las cebollas cocidas y caramelizadas en la superficie.